3 PLUMAS

No, no va esto de cobardías no, bueno, un poco de cagadita si hay pero no por cuestión de valor.

Resulta que han llegado los reyes a casa y como saben de mi afición a la lectura, pues entre otras lindezas me han traído dos libros.

Poseo la "mala" costumbre de tener en la recámara algún libro pendiente de leer o estar siempre leyendo alguno, pero no porque no me guste la lectura o me cause apatía, sino porque tengo "muchos" libros.

Soy lector digamos, tranquilo, me gusta disfrutar de lo que leo, el leer, para mí es un bálsamo que suelo usar como terapia.

Me gusta el libro de papel, el de siempre, tengo un e-book de esos que uso, no te lo pierdas, como sujeta-libros, me parece que el placer de un libro reside además de su posesión, en su olor, su tacto y su vista, el placer debe ocupar al máximo de los sentidos y los libros electrónicos se quedan en dos, posesión y lectura.

Pero sigo, que me disperso, pues los señores magos me han traído dos libros que debo sumar al que estoy leyendo ahora, de ahí lo de las tres plumas, algo pedante ya lo sé, pero no creo que A. E. MÁSON se cabree, pues bien, como los reyes ¡¡¡atención spoiler!!!, son los padres, lo siento niños, y en mi caso por cuestiones de la edad son mis familiares más cercanos y por ende los que mejor me conocen, me han regalado lo que según ellos eran los libros más apropiados para mí.

Mis hijas me han obsequiado con "Los Simpsons y la filosofía", si esto no es conocerme que venga Nietzsche y lo diga, este lo leeré a ratos porque me puede hacer falta acudir a Homer y “su” filosofía alguna que otra vez.

Mi mujercita, "El regreso del Catón" que es la continuación de "El último Catón" y que es una novela que me impactó tanto que hice de uno de sus personajes, acortando el nombre, mi nickname. Este lo leeré cuando tenga largos espacios de tiempo porque se merece toda mi atención.

Y en cuanto al libro que estoy leyendo actualmente, se trata de "Haciendo República" de Julio Camba, que es tan periodístico y español, el libro digo, que se puede leer cada mañana en el baño (aquí está la cagadita que nombré al principio) como si de un diario de actualidad se tratase.

Total que estas son mis tres plumas para comenzar el año, seguramente se multiplicarán porque tengo ese "vicio" de comprar libros que no se quita ni con terapias ni centros de rehabilitación, soy un enfermo del papel escrito y seguidor de aquella premisa del programa de "la bola de cristal" que decía mientras mostraba un rebaño de ovejas: "si no quieres ser como ellos, lee"

A juí.